viernes, 8 de mayo de 2015

La ideas de UPyD no son de UPyD: que nadie llore por la muerte del partido de Rosa Díez.

   La ideas no son de las organizaciones que las hacen suyas, sino de las personas concretas que las piensan. Por eso cuando muera UPyD no me dará ninguna pena.
   Lo importante es que vivan y sigan pensado las personas creadoras y defensoras de esas ideas, y que encuentren un instrumento para trabajar sin autoritarismos y en un equipo que funcione con democracia interna, para defenderlas (esas ideas) y hacer que cada vez más personas crean en ellas, y se sumen a la ilusionante tarea de regenerar la democracia de verdad y de construir la Tercera España.
   Yo fui de UPyD durante cinco años. Ahora no lo soy. Pero sigo creyendo en sus ideas. Por eso sigo manteniendo en mi Blog todos los artículos a favor de UPyD que publiqué desde antes de ser candidato a la alcaldía de Vigo hasta que fui sancionado y expulsado. Y sigo aplaudiendo muchas de sus propuestas. Pero también, desde que abrí los ojos (cegados por un cierto sectarismo y fanatismo, lo reconozco) cuento sus corrupciones y advierto del fraude que supone UPyD. Y afirmo que no se puede creer en la democracia y defender esas ideas a las que antes me refería (bosquejadas en el Manifiesto Fundacional de UPyD) desde dentro de ese partido.
   UPyD se acaba. Las causas del desastre no hay que buscarlas fuera, sino dentro: Rosa Díez y su despótica y mafiosa guardia pretoriana, que secuestraron y adulteraron el proyecto original.
   Parafraseando al Cantar del Mío Cid: ¡Qué gran partido si tuviera un buen señor!
   Es triste lo que pudo haber sido y no fue. Pero no lloraré por UPyD. Las personas que valen la pena siguen vivas. Porque las ideas se pueden copiar... pero las personas no.
   Cuando UPyD resulte derrotado en la batalla final, algunos recogerán el cuerpo de su líder para darle culto. Otros seguiremos luchando para que se extiendan y terminen imprimiendo sus beneficiosos efectos las ideas aportadas y compartidas por todos los que hemos estado unidos, simpatizando en algún momento con UPyD.
   No lloréis por UPyD. Las ideas que defendemos no han muerto ni desaparecerán: incluso seremos capaces de perfeccionarlas.
   Pero aprendamos la lección y busquemos nuevos guerreros y nuevos líderes que continúen la guerra: una nueva manera de hacer lo mismo, con otros que también quieran hacerlo.
   Como dijo un sabio judío hace 20 siglos: quien no está contra mí está conmigo.
   Borrón y cuenta nueva. Sin lastres.

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