viernes, 11 de agosto de 2017

Casi todos de acuerdo: NADIE DEBE SER PRESIDENTE NI ALCALDE MÁS DE OCHO AÑOS. Consideraciones sobre la limitación de mandatos.

Axioma: el ejercicio prolongado del poder genera corrupción de forma casi inevitable.
"Los pañales y los políticos deben ser cambiados con frecuencia,
ambos por la misma razón."
   El reciente caso de Angel María Villar, 29 años al frente del fútbol español, que el mes pasado fue detenido acusado de los delitos de administración desleal, apropiación indebida, corrupción entre particulares y falsedad documental, es paradigmático. Un mandato prolongado como ese es una anomalía democrática, una rareza institucional y, lo peor, un foco de corruptelas y favoritismos (Ver).

Un titular de marzo de este año. Ref.
   Si viviéramos en una democracia de alto nivel, en la que los que mandan pueden ser controlados por los ciudadanos y por instituciones independientes que funcionen bien, quizá no haría falta limitar el tiempo máximo que se pueden ejercer ciertos mandatos.
   Pero la realidad se empeña en demostrar que cuando alguien se mantiene mucho tiempo en un cargo público, se apega al mismo. Y entonces se dedican a controlarlo todo y a todos, especialmente a través de medios de comunicación sometidos al poder (comprados con dinero  público), y dedicando los presupuestos y concediendo ayudas y subvenciones a cambio de votos, ofreciendo el dinero como si fuera de su bolsillo, acusando de todos los problemas a la oposición... y todo eso con el único objetivo de ser reelegido y continuar en el sillón...
   Esos líderes que repiten cargo y pretenden seguir en él no lo hacen necesariamente para hacerse millonarios, pues la sensación de detentar el poder es una droga más poderosa que el dinero. Y al final lo pagamos los ciudadanos, las ciudades y el estado: pues esos líderes descuidan su trabajo de servicio a la comunidad, y se dedican a hacer campaña durante todo su mandato, manteniendo engañado al pueblo, haciendo creer a las masas acríticas -con el apoyo de su cohorte de paniaguados y palmeros- que todo va bien y que no hay alternativa...
   Por eso cada vez más personas y más partidos políticos están de acuerdo en que para defender al pueblo de posibles dictadores, sátrapas, autócratas y caciques, se deben limitar los cargos de presidentes y de alcaldes a ocho años.
   Ciudadanos lo ha exigido desde el principio a la hora de negociar con PSOE y con PP.
Enlace a la noticia (de junio de 2015).
   De hecho el pacto que firmó C's con el PP para apoyar la investidura de Mariano Rajoy implica que el líder del PP no podrá volver a ser presidente, y así lo ha dejado muy claro Albert Rivera (Ver). Sin embargo Rajoy ha insinuado que quizá se vuelva a presentar como candidato (Ver). Ciudadanos le ha advertido que eso supondría incumplir su compromiso (VER).
   Y por su parte Alberto Núñez Feijoo, presidente del Gobierno de Galicia, ha demostrado falta de lealtad a la palabra dada por su partido al acusar a Ciudadanos de "atacar los derechos civiles" por exigir la limitación de los mandatos de Rajoy... (Es una muestra del nivel del PP, y espero que en ese partido haya gente decente y valiente que consiga echar a tantos políticos infumables que tienen en sus filas).
   Por suerte para los ciudadanos (y por desgracia para algunos políticos enrocados en sus puestos) la limitación de mandatos es inevitable. Los dos Partidos que han emergido con más fuerza en el panorama político español estos últimos años lo tienen cada vez más claro. En marzo de este año Ciudadanos y Podemos se reunieron para estudiar promover una reforma de la Ley de Gobierno para limitar los mandatos de presidentes, y que podría ser extensible a los alcaldes con otro cambio legal. PP y PSOE aunque se han manifestado a favor de la idea, ponen pegas alegando que esa medida requeriría una reforma de la Constitución.
Titular de la noticia de Europa Press (de fecha 10 de marzo de 2017: VER)
   Dentro del PSOE cada vez son más las voces que se suman al clamor. El líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, defendió en la ponencia marco del reciente congreso de su partido celebrado el mes pasado la limitación a dos mandatos para los cargos, mientras que el PSOE permite tres.
Referencia a la noticias, de fecha 19.7.2017 VER.
   La nueva portavoz socialista en el Congreso, Margarita Robles (elegida por Pedro Sánchez), declaró recientemente (tras la detención del mencionado Villar) que el nivel de corrupción es insufrible, y que por sanidad democrática los mandatos deben limitarse en todas las instituciones, sea la que sea:
Declaraciones de la portavoz del Psoe, Margarita Robles, el pasado mes (Ver).
   El propio líder del Psoe se ha comprometido con el de Ciudadanos a negociar este otoño algunos temas, entre ellos cómo poder introducir en nuestro ordenamiento jurídico la limitación de mandatos, incluso si el PP se opone (Ver):

   Y también dentro del PP cada vez se oyen más voces en este mismo sentido, como la propuesta que hicieron los populares de la Comunidad Valenciana, liderados por Isabel Bonig de que se debatiera la limitación de mandatos en el Congreso del Partido VER. Que tuvo su antecedente en la propuesta concreta de limitación de mandatos de un grupo de jóvenes alcaldes del PP: VER:
   En Andalucía, el PP hizo el pasado diciembre la propuesta de limitar a dos mandatos la presidencia de su comunidad y los cargos de consejeros, y obtuvo el apoyo de la tramitación de esa ley con el voto a favor unánime de todos los grupos políticos VER:

   Sin embargo el Consejo Consultivo Andaluz paralizó en junio de este año esa propuesta del PP, alegando que hacía falta modificar el Estatuto (VER).
   En varias Comunidades Autónomas ya han legislado en ese sentido, y el cargo de Presidente está limitado a ocho años o a dos legislaturas. Desde 2013 ya cuentan con esa limitación Extremadura(VER), Murcia (VER), y las dos Castillas (VER). Otras CCAA también lo están planteando, como Asturias (VER) y Rioja (VER):

   En la Comunidad de Madrid ya lo están trabajando a propuesta de C's: VER:
   El ahora académico José María Ansón ha explicado cómo el límite de mandatos para los Presidentes estuvo a punto de ser incluido en el texto de nuestra Constitución, pero que no se hizo por imposición de Adolfo Suárez quien en 1978 pensaba que iba a gobernar hasta el año 2010 (Ver).
   En los países más democráticos los políticos no se aferran al cargo, y tampoco viven exclusivamente de la política: muy útil resulta el ejemplo de Suiza, promovido en España por Daniel Ordás, de cuyas ideas ya he escrito en este Blog (VER)En la antigua Grecia muchos cargos se elegían por sorteo, que se consideraba más democrático que la elección, ya que esta favorecía a los más ricos y poderosos... y había limitación anual o bianual de mandatos: la democracia era lo contrario a la monarquía, que era vitalicia.
   Esperemos que en esta legislatura -o como mucho en la siguiente- se limiten definitivamente los mandatos presidenciales y de alcaldes. Solo se pueden oponer a esa medida quienes mantengan intereses personales y padezcan delirios de grandeza: personas que ejercen un populismo agresivo pero que no sirven por encima de todo al bien común, lo cual les hace indignos de seguir ejerciendo el cargo al que se aferran con soberbia y avaricia.

 
   Otro ejemplo paradigmático de corrupción, evitable con limitación de mandatos, es el de Jesús Gil y Gil, empresario que fue alcalde de Marbella entre 1991 y 2002 y que acabó en la cárcel, a quien dedicaré el siguiente artículo de este Blog. (En construcción).

 

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